Podríamos definir la espeleología como la exploración de cuevas y simas desde un punto de vista «deportivo». Así que no estamos hablando de dar un paseo en barca o bajar por unas escaleras de madera, con focos y barandillas… Aquí tienes que progresar con tu esfuerzo y agilidad, y como tal, solo se puede realizar con el material adecuado y, salvo que seas experto, con la supervisión de guías profesionales que garanticen tu seguridad… y la del entorno. Las cavidades se encuentran entre los lugares más delicados y sensibles.
Como actividad de turismo activo, tiene su propia técnica, que deberás aprender para adaptarte a las dificultades: oposiciones, cuerdas, buceo…
Mucha gente tiene prejuicios contra la espeleología… «Eso no es para mí». El problema es que mucha gente se imagina (porque es lo que se ve en películas y tal) que la vamos a meter en un agujero por el que no caben… Es como si pensaran que si nos contratan una ruta senderista fácil les vamos a llevar al campo base del Everest. Pues igual te estás perdiendo algo muy guay, ¿me crees si te digo que son de las actividades que más satisfechos salís?
Por cierto, he hablado de «cuevas y simas» y lo mismo algunos os habéis perdido un poco… ¿Conoces la diferencia? Es simple… Una cueva sería una agujero en la pared, y una sima, en el suelo. Te puedo contar una anécdota relacionada con esto… Hace años, había quedado con una amiga ecuatoriana, y me preguntó qué iba a hacer al día siguiente. Le dije que iba a una sima, y me preguntó si podía venir. «Ah, ¿pero tienes experiencia?» «¡He hecho muchas!» ¡Menuda sorpresa!
Así que al día siguiente… Muchos ya lo veréis venir… tenéis que recordar el acento ecuatoriano… Cuando llegamos a la entrada de la sima, dijo asustada «¿¿Vamos a entrar ahí??» «Claro, me dijiste que ya habías hecho otras simas» «Sí… caminábamos hacia arriba de una montaña y llegábamos a la «sima»»…
Cuando aparece la espeleología en las noticias siempre es para hablar de desgracias. Y si la ves en redes sociales, suele ser el paso más estrecho y agobiante que ese espeleólogo ha cruzado jamás. Pero como en todo, hay niveles, e igual que no empiezas a hacer senderismo subiendo un ochomil, no te debes meter en una cavidad difícil el primer día.
Nosotros utilizamos la misma valoración de la dificultad que en el resto de actividades, ya que al ir acompañado de un guía, la dificultad no es la misma que puedes encontrar buscando por Internet, la cual suele ir dirigida a espeleólogos que no la conocen y deben enfrentarse a ella sin ayuda.
Como muchos sabéis, al terminar la actividad solemos enviar una encuesta de satisfacción. Y efectivamente, la espeleología es de las mejor valoradas. Me acuerdo muchas veces de Juan, aquel jubilado que, saliendo de la cueva del Toro, me abrazó y me dijo: «esto era el sueño de mi vida».
¿Sabías que recientemente hemos añadido a nuestro catálogo una interesante cavidad muy cerquita de Valencia? La sima K28 está en término de Serra, tiene la curiosidad de ser una travesía (entras por un sitio y sales por otro) y encontramos descensos por cuerda, pequeñas escaladas, gateras, oposiciones… También muchas formaciones y la famosa sala de los órganos.
El nivel es fácil, es apta para iniciarse y la duración de unas 2 horas. Nosotros te proporcionamos todo lo necesario. Por cierto, ¿sabes por qué se llama así? Porque está junto a la carretera, justo en el km 28.
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